Cohete chino desafía las leyes de la física

China dispondría en la actualidad de un cohete hipersónico cuyas prestaciones desafiarían las leyes de la física conocida. Así lo reveló Financial Times citando fuentes del Pentágono. Según la información divulgada por dicho diario, durante el verano, satélites espía de EE UU siguieron las  actividades militares chinas, entre ellas las pruebas realizadas con un cohete capaz de efectuar maniobras absolutamente inusitadas: consiguió velocidades en vuelo cinco veces superiores a la velocidad del sonido. Demostró además una autonomía de largo alcance porque dio la vuelta al mundo sin ninguna dificultad. Pero el remate de esta proeza vino cuando los sistemas de espionaje estadounidenses observaron que, mientras estaba volando, del interior del arma salió otro cohete con idénticas prestaciones que su nodriza. Finalmente, el vehículo impactó en un objetivo sobre territorio chino como parecía tener previsto. La prueba dio la impresión de haber sido un completo éxito. 

El Pentágono no se explica cómo han logrado desarrollar un aparato de semejantes características

Los expertos en tecnología del Pentágono están tan desconcertados como sorprendidos. No entienden cómo el gigante rojo ha conseguido desarrollar un aparato con semejante rendimiento y extraordinarias características. Consideran literalmente, según el Financial Times, que "China ha podido superar los límites de la física". De hecho, el estupor ha alcanzado tal grado entre los ingenieros militares de DARPA, la agencia de tecnología para la defensa de EE UU, que han llegado a hablar de un "momento Sputnik", en recuerdo del sobresalto provocado por la URSS a mediados del siglo  pasado, cuando puso en órbita el primer satélite artificial de la historia y obligó al presidente Eisenhower a iniciar el programa espacial estadounidense bajo el paraguas gubernamental. 

China ha incrementado la investigación en armamento de vanguardia, desde aviones invisibles a cohetes hipersónicos.

INTERESES OCULTOS

No obstante, hay muchas cuestiones pendientes alrededor de esta noticia. Esta tecnología sin precedentes, como la califica el Pentágono, no ha sido reconocida por Beijing. El portavoz de la embajada china en EE UU declaró al Financial Times que su país no había probado ninguna arma como la aludida y que todas esas filtraciones respondían a una campaña de desprestigio de Washington para dañar la imagen china y justificar ante sus ciudadanos norteamericanos una política de rearme y la inversión en desarrollo de armas hipersónicas. El portavoz de la embajada únicamente asumió determinados ensayos civiles orientados a probar tecnología de vuelos espaciales reutilizables. Sin embargo, a nadie se le escapa que en las últimas décadas China ha incrementado notablemente sus Fuerzas Armadas, así como la investigación en armamento de vanguardia, desde aviones invisibles a cohetes hipersónicos.

Pese a lo cual, tampoco es descartable que la revelación del Financial Times responda a una estrategia de ciertos sectores de la industria armamentística de EE UU para generar una clima de preocupación general que aumente el presupuesto militar para el próximo año. Precisamente en estas semanas se estuvo discutiendo la asignación económica para defensa de 2022. La Administración Biden ha estancado la cantidad prevista situándola en cifras iguales o algo inferiores al incremento notable que realizó su predecesor Trump.