¿Abastece PEMEX a los ovnis? Hay quien se lo cree

Hay noticias que son difíciles de creer. ¿Ovnis repostando combustible en una refinería? ¿En serio? ¿Es posible que una nave espacial interestelar funcione con gasolina de 95 octanos? Por favor.

Y, sin embargo, varios medios mexicanos recogen la noticia de que Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) infiltró en una refinería de PEMEX (Petróleos Mexicanos) a investigadores para comprobar si era verdad que allí es donde los “extraterrestres” repostan combustible para sus naves. 

¿Es posible que una nave espacial interestelar funcione con gasolina de 95 octanos? ¡Por favor!

Eso sucedió, en concreto, en la refinería Francisco I Madero, en Ciudad Madero, en el sur de Tamaulipas, según refiere la cronista vitalicia del Ayuntamiento de Ciudad Madero, Carolina Infante Pacheco.

Catedrática en el área de Turísmo por el Instituto de Estudios Superiores de Tamaulipas, Carolina Infante reveló a El Sol de Tampico que hace más de 20 años, concretamente, a principios del 2000, existió una investigación sobre la refinería Francisco I Madero, bajo la hipótesis de que en aquí se proporcionaba combustible para los ovnis.

Según refiere, hasta Ciudad Madero acudió una antropóloga de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) afirmando que ella tenía pruebas de que en la Refinería Francisco I. Madero estaban construyendo una base extraterrestre.

Desde hace años, se rumorea en Madero y Tampico, dos municipios costeros del Golfo de México que, a unos 13 km. mar adentro, en las proximidades de la playa de Miramar hay una base submarina alienígena que vela por la integridad de las poblaciones de Tamaulipas, evitando la acción perniciosa de huracanes y tormentas.

Desde 2020 protagoniza en esta región sus contactos con ovnis, Juanito Juan que ha revolucionado las redes sociales con sus espectaculares fotografías diurnas de objetos esféricos no identificados en los cielos del municipio de Valle Hermoso.

Juan Manuel Sánchez, alias Juanito Juan y una de sus fotos ovni

Según Infante Pacheco "la investigación [de la UNAM] se realizó con la reconfiguración de la refinería Francisco I Madero, al existir por parte de una investigadora la teoría que ella sustentaba que el lugar es utilizado para brindarle el combustible a la base ovni que existe aquí en nuestra zona"

Infante Pacheco manifestó que, durante esta reconfiguración de la refinería, hace veintitrés años, se realizaron diversas labores para instalar las estructuras de tamaños descomunales que despertaron inquietud en la población.

"Recuerdo que se realizaron diversas labores para poder trasladar el material, lo que despertó el interés de la investigadora y ella decía que tenía fotografías donde estaban metiendo a la refinería esas estructuras para construir una base extraterrestre" –concluye. Y añade: "Buscamos los permisos pertinentes para que ella pudiera accesar y obtuviera las pruebas necesarias de su investigación que estaban basadas en diversas teorías"

PEMEX no se ha molestado en desmentir las afirmaciones y la UNAM tampoco se ha pronunciado

Es decir, salvo por el testimonio de Carolina, todo se basa en el rumor y la suposición. PEMEX, como es obvio, ni siquiera se ha molestado en desmentir, como tampoco lo ha hecho la UNAM al no proporcionarse nombre, ni detalles, de la "presunta antropóloga infiltrada". Que Carolina Infante Pacheco sea, además, catedrática en turismo, nos hace sospechar que todo se resuma en una estrategia para atraer el turismo a la región, como han hecho en el pasado otras poblaciones mexicanas con éxito ante el empuje y difusión de los temas relacionados con los ovnis.

La noticia se difunde el 5 de mayo, aniversario de un célebre avistamiento protagonizado por un avión de la Fuerza Aérea Mexicana que filmó con su cámara infrarroja una escuadrilla de ovnis sobre la región de Campeche. La versión oficial es que la lectura del FLIR se correspondía con las llamas de las chimeneas de las plataformas petrolíferas de PEMEX en el Golfo de México, igual los ovnis iban camino de repostar… nótese la ironía.