Estados Unidos desarrolla kits portátiles de detección de ovnis
El Ejército de los Estados Unidos ha desarrollado kits portátiles de detección de ovnis y, a la vez, niega la existencia de tecnología extraterrestre
Mientras que el reciente informe de la AARO (Oficina de Resolución de Anomalías en Todos los Dominios) asegura no haber encontrado evidencia de tecnología extraterrestre en ningún avistamiento UAP, el mismo informe dice que, Ejército de Estados Unidos, está desarrollando kits portátiles de detección de ovnis para recopilar mejores datos.
Puede parecer una contradicción. De hecho, lo es porque cuando los periodistas preguntaron al director interino de la AARO, Timothy Phillips, si habían detectado tecnologías de algún adversario, respondió que "en cuanto a tecnologías avanzadas, ha habido algunos casos, pero no podemos discutir eso aquí".
Vamos a ver. Por un lado, dices que la gran mayoría de los UAP son básicamente confusiones de objetos convencionales. Entendemos, por tanto, que el pequeño porcentaje que no lo son, obedece a sofisticados dispositivos de naciones extranjeras, pero cuando se te pregunta sobre ello… ¿“no podemos discutir eso aquí”? Y luego dicen que son transparentes.
Vayamos a los nuevos kits de detección portátiles, que reciben el nombre de Gremlin, y no por los adorables y traviesos seres de la película estrenada hace 40 años por Amblin, sino por las invisibles criaturas que, durante la II Guerra Mundial, saboteaban todo tipo de maquinarias.
Estos Gremlins, que ya se están probando en un campo de tiro de Texas, consisten en una serie de sensores que caben dentro de una funda protectora.
"Si tenemos un sitio de seguridad nacional y se informa que hay objetos dentro del espacio aéreo restringido o dentro de un alcance marítimo o dentro de la proximidad de una de nuestras naves espaciales, debemos entender qué es eso", ha relatado Phillips y ha agregado que "es por eso que estamos desarrollando capacidades de sensores que podemos implementar en respuesta a los informes".
No proporcionó más detalles del ingenio, ni tampoco figuran en el informe por tanto no sabemos en qué se fundamenta esta tecnología, ni si es distinta de los detectores de ovnis que puedes comprar en el mercado, por menos de 100 dólares, y que se iluminan cuando detectan una anomalía de caracter electromagnético.
La AARO recibe alrededor de un centenar de nuevos avistamientos ovni cada mes y –asegura Phillips- que resuelve aproximadamente el mismo número. Desde 2022 ha recibido la friolera de 1200 informes de avistamientos y ha examinado las investigaciones y los esfuerzos del Gobierno estadounidense relacionados con este fenómeno, que se remontan a 1945.
Algunos de los avistamientos de ovnis –dijo- fueron reportados por personas que, sin saberlo, presenciaron las pruebas o el uso de tecnología estadounidense clasificada y puso como ejemplo, las afirmaciones de quienes dijeron haber visto naves espaciales extraterrestres cerca de Roswell, Nuevo México, en 1947 que eran consistentes con un globo lanzado bajo un programa clasificado llamado Proyecto Mogul.
"Los resultados agregados de todas las investigaciones (del Gobierno de los Estados Unidos) hasta la fecha no han encontrado ni un solo caso de UAP que represente tecnología extraterrestre", asegura el informe.
En febrero, la oficina cerró 122 casos, la mayoría de los cuales eran escombros en la atmósfera y el 68 por ciento de los casos consistían en globos o basura en el aire que sensores avanzados pudieron detectar.
Desde su creación en 2022, la AARO se comprometió a realizar su trabajo con transparencia, fue la motivación para su creación. Sin embargo, su decisión de publicar un informe que exonera al Departamento de Defensa mediante tácticas de prensa excesivamente controladoras –el informe se presentó el pasado miércoles ante un reducidísimo grupo de periodistas- contradice abiertamente cualquier ideal de transparencia. Y esto es así porque, a diferencia de otros informes y comparecencias, éste Tomo I del informe trataba de dar respuesta a las acusaciones, por parte de una treintena de denunciantes que, aseguraban que el Pentágono ha llevado a cabo actividades no autorizadas y amenazas.
En la rueda de prensa, Phillips no pudo confirmar si la AARO había resuelto algún caso de UAP con objetos "transmedios" o que cambian de forma, o tecnologías innovadoras generadas por Estados Unidos, China o Rusia porque se trataba de hacer regresar el asunto ovni a la casilla de salida, como ya ocurrió en 1968 con el Informe Condon, sólo que ahora hay legisladores en el Capitolio dispuestos a seguir en la lucha. Veremos cómo va el segundo asalto.
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